ENCUENTRO MEDIOAMBIENTAL ALMERIENSE: EN BUSCA DE SOLUCIONES

AGRICULTURA INTENSIVA BARRA DE EXPLORACIÓN

DOCUMENTOS DE TRABAJO Y COMUNICACIONES

LOS INVERNADEROS Y EL MEDIO AMBIENTE

Francisco Palomar Oviedo

 

Impactos ecológicos de los invernaderos

 

Consideraciones generales

El invernadero ha sido el principal protagonista del desarrollo de la Costa Occidental de Almería, también conocida como Comarca del Poniente. Sin embargo, como reverso de una misma moneda, igualmente ha causado una serie de efectos negativos de gran importancia ecológica.

El medio ambiente es el conjunto de todas aquellas circunstancias que rodean al ser vivo y con las cuales se encuentra en continua relación. Forma parte del mismo el clima, el suelo, el agua, el paisaje y los seres vivos (animales y vegetales). Otra definición, considera aquél como "el sistema constituido por los elementos físico-naturales, estéticos, culturales, sociales y económicos que interactúan con el individuo y la comunidad en que vive".

El invernadero rompe la continuidad y estética del paisaje de una forma abrupta. Para instalar un invernadero se roturan eriales, se desmontan cerros ó se sustituyen parrales y otros cultivos.

El invernadero modifica el clima del interior creando un medio artificial, en el que las diferencias de temperatura y humedad relativa, respecto del exterior, son considerables. Este cambio climático unido a la aportación del agua de riego, produce un desarrollo espectacular de la vegetación, que pasa de manera brusca, del erial desértico a los frondosos cultivos hortícolas y tropicales. El cambio ambiental se traduce también en una mayor proliferación de plagas y enfermedades. Sin embargo los pájaros y conejos tienen menos acceso aunque no lo impide este tipo de construcciones.

Además de las roturaciones y desmontes, existen canteras en algunas cañadas donde se extrae la tierra que se emplea para crear suelo agrícola en terrenos pedregosos. En algunos de estos lugares, ha aflorado el agua de la capa freática, formando charcas donde se han asentado colonias de aves acuáticas constituyendo una zona húmeda de gran interés ecológico en la Comarca del Poniente.

Las cantidades tan elevadas de abono y productos fitosanitarios, están produciendo una contaminación de las aguas subterráneas de los acuíferos, así como de las albuferas de Adra. Además el espectacular desarrollo de los invernaderos ha dado lugar a un elevado consumo de agua para el riego, que ha originado un descenso del nivel de los acuíferos, ocasionando intrusión marina en determinados puntos de la costa.

El empleo de cantidades masivas de estiércol procedente de otras zonas, produce contaminación de los terrenos por semillas de malas hierbas, sales, hongos del suelo, etc., además de infección de las aguas subterráneas.

La extracción de arenas destinadas a los invernaderos han producido una degradación en determinados parajes costeros.

Una solución ecológica que los agricultores emplean para favorecer el cuajado de sand¡as y melones, son las colmenas. Recientemente y cada día en mayor número, los cultivadores de tomate, instalan colmenas de abejorros en sus plantaciones evitando el uso de fitorreguladores para el cuaje.

El invernadero ha determinado la introducción en la Comarca de nuevas especies hortícolas y de un elevado número de variedades, por su mayor rentabilidad que las autóctonas, a las cuales han desplazado. En el aspecto negativo el invernadero ha favorecido la aparición y desarrollo de nuevas plagas, enfermedades y virosis.

La enorme cantidad de insumos que se emplean en estas explotaciones intensivas, producen una gran cantidad de materiales de desecho, que junto a los restos vegetales y pl sticos degradados, dan un aspecto antiestético y deprimente a nuestros campos, agravado por el problema de la contaminación atmosférica como consecuencia de la incineración incontrolada de estos materiales a pesar del esfuerzo de las Autoridades locales para evitar estas nefastas prácticas.

Las elevadas temperaturas y humedades relativas que se registran en los invernaderos, afectan a las personas que trabajan en el interior y propician los resfriados, gripes y otras enfermedades. Los tratamientos fitosanitarios son causa frecuente de intoxicaciones, como consecuencia del empleo irracional de los productos químicos ó por accidentes. Una causa negativa para la comercialización de los productos hortícolas, es el problema de los residuos de pesticidas.

Este tipo de agricultura ha sido determinante para el desarrollo demográfico y económico de la comarca, con las repercusiones en los sectores de la construcción de viviendas, comercios, servicios y vias de comunicación. En el aspecto negativo, es de destacar la contaminación de los acuíferos subterráneos y del mar por las filtraciones y vertidos de aguas residuales de las poblaciones y el excesivo número de accidentes de circulación.

Como colofón:

al desarrollo sostenible, armónico respetuoso con el Medio Ambiente y No al desarrollismo incontrolado y a cualquier precio.