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DÍA MUNDIAL DEL MEDIOAMBIENTE; NECESITAMOS CAMBIAR EL MODELO PARA PODER TENER FUTURO

El Grupo Ecologista Mediterráneo alerta sobre el deterioro de un planeta castigado por la irresponsabilidad medioambiental

Este sábado, 5 de junio, se celebra en todo el planeta el Día Mundial del Medio Ambiente y es momento de reflexionar sobre si estamos ante una fiesta o ante un sepelio. Los mensajes que nos llegan desde las grandes instituciones internacionales (ONU, Unión Europea, Panel Internacional del Cambio Climático y otras organizaciones privadas y públicas, incluyendo a gobiernos de todo el mundo) ya no hablan de futuribles, sino de una situación que ha pasado de preocupante a alarmante.

El problema radica en que una parte importante de la sociedad, del tejido empresarial y hasta de nuestros representantes políticos aún no han asumido que el mundo, tal y como lo conocemos, se enfrenta al mayor reto de la historia de la humanidad, porque es el futuro del planeta y sus habitantes lo que nos estamos jugando en el día a día.


Tanto desde la comunidad científica, analistas económicos o colectivos ecologistas y sociales lo tienen claro; el momento de actuar es AHORA si queremos poner algo de cordura al deterioro de las condiciones de habitabilidad de nuestro mundo. Y tenemos claro que las decisiones que pueden cambiar la deriva actual dependen de los gobiernos y de las altas instituciones.

Así que el trabajo a desarrollar está claro: hemos de convencerles de esa apuesta por el desarrollo sostenible, presionarles para que tomen las decisiones correctas de forma que la clase política, la nuestra y la de todo el mundo, hagan lo que la ciudadanía del mundo queremos y necesitamos, y no lo que les impongan las cúpulas dirigentes o los grandes grupos de presión que están condicionando las decisiones políticas desde hace décadas.

Almería no está al margen, ni mucho menos, de esa necesidad de cambio, esa apuesta por un mundo, un territorio o una provincia donde sea posible seguir viviendo durante los próximos años o siglos. Nos amenaza el cambio climático y sus sequías prolongadas, la contaminación por residuos de todo tipo, desde los urbanos, aguas residuales o plásticos, perdemos tierras fértiles por la erosión, vemos disminuir poco a poco los recursos pesqueros, aumentan sin cesar los regadíos en una tierra seca, cuando la producción ha tocado techo y no hay nuevos mercados ni consumidores a los que vender nuestras hortalizas.

Lamentablemente sigue siendo frecuente encontrar respuestas que ignoran, cuando no desprecian directamente, unas realidades que están sustentadas por investigadores/a, la comunidad científica, colectivos profesionales, la propia Universidad de Almería e incluso entidades financieras que dedican parte de sus recursos a avanzar en los preceptos del desarrollo sostenible o la economía circular.



Tenemos la obligación de mantener el tono reivindicativo para conseguir que aquella frase acuñada en los años noventa del pasado siglo, “el futuro ya no es lo que era” deje de tener vigencia y por ello desde el Grupo Ecologista Mediterráneo pedimos que más voces se unan a esa batalla por el futuro, que más gente sepa que nos estamos jugando el futuro de nuestra tierra, que no podemos mirar para otro lado sin que finalmente nos salpique un deterioro que, al fin y al cabo, lo primero que se lleva por delante es nuestro anhelo por mejorar, las condiciones en las que nos vemos abocados a vivir y ese futuro que no es nuestro, sino de los que vendrán después que nosotros.


¿Qué les podremos decir a nuestra descendencia cuando nos pregunten cómo pudimos permitir la destrucción de la esperanza? Nosotros queremos tener respuestas, pero en ese barco deberíamos estar todos los almerienses, o al menos esa gran mayoría que pensamos que son inteligentes y comprometidos con su tierra.


Almería, 5 de Junio de 2021

GRUPO ECOLOGISTA MEDITERRÁNEO

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